A veces, cuando vuelvo a respirar a solas,
Tu imagen llena la habitación en que me encuentro, dejando de
Lado toda precaución, barrera o disimulo con que
Siempre amurallo mis amores. Hasta hoy,
Que todo eso cae vencido por el aire, y
Quieras o no, empuja mi verdad hacia delante:
y es que te quiero.