¿Qué crees que podemos perder? No hay nada que podamos arrebatar al tiempo: él sólo nos da una pequeña distancia de ventaja y, al final, acabará quitándonos lo que comenzó.

Sé que muero sin sentido cada vez que me gana el miedo. Miedo a encontrar tu ausencia y no tenerte para sentirme completa. Miedo a un futuro aún inexistente que llegue a cambiar este presente tan lleno de vida. Sin embargo, ese mismo miedo me ha enseñado a impulsar la huida hacia esperanzas que puede que aún no conozca, pero en las que tengo fe. Quizá la única fe que me mantiene. Esta fe que hoy lleva tu nombre.

Puede que el tiempo rompa de nuevo la calma. Puede que, de nuevo, sólo me quede el silencio y un agujero de cristal roto.

Pero el tiempo no podrá nunca robar el misterio y maravilla que representas.
La capacidad de darme vida que has demostrado.
Tu sonrisa, tu silencio.
Tu mirada en una máscara de ternura no tan oculta.

Te tengo dentro.

Tiempo: he ganado.