4.16.2006

Acabo de dejar un comentario en el blog de María. Ella se hace planteamientos sobre el origen del amor (¿es posible autoenamorarse? ¿y dosificar ese amor?). Yo he sido incapaz de poner mi cabeza en marcha para pensar sobre lo que plantea y dar una opinión al respecto.

Si no fuera por lo tranquila que estoy, diría que estoy totalmente ebria de amor.

Huelo la ropa que llevo, mis manos, mi pelo. Todo lleva el olor de quien amo, prolongando el último abrazo de hoy. Como digo, me siento en calma, aunque con un cosquilleo interno, como una sonrisa inquieta que a veces se asoma a los labios. Es inevitable.

Nunca pensé que me pudiera sentir así. Nunca lo había imaginado. Sí sabía que se podía dar todo por alguien, sí que se podía querer mucho. Pero no conocía esto, no entendía a los que hablaban de ello con una sonrisa tan grande, y ahora mismo soy incapaz de explicarlo.

Creo que nunca podré decir suficientes veces "gracias".


Me apetece cuidarte. Y convertirme en una vibración hermosa que te haga sentir vida.

2 comentarios:

Emma was an angel dijo...

verdad que es demasiado.. demasiado a veces irreal. Uno siente que no lo merece, pero llega.Besos!

.María. dijo...

La verdad es que alucino un poquito leyendote asi de sincera. Me encanta. Me hace sonreir el verte asi de tontorrona, jejeje.
Te deseo lo mejor siempre, Patri.
Un besoteeeee.